jueves, 29 de diciembre de 2011

EL AIKIDO

El nombre de aikido, es una composición de tres vocablos o ideogramas
Japoneses cuyo significado etimológico es el siguiente:

AI: unir, armonía, unanimidad, amor.
KI: energía, fuerza vital, el espíritu, aliento.
DO: estudio, búsqueda, camino, vía, modo

El Maestro y fundador de esta disciplina, Morihei Ueshiba lo definió de la siguiente manera: “El Aikido es el camino de la armonía entre el hombre y el universo”. Fue creado a mediados del S XX. Este Arte Marcial es el compendio de antiguas escuelas de sable y de bastón, y su transformación en técnicas a mano desnuda. Esta adaptación se produjo bajo el prisma personal del maestro Ueshiba y tiene aplicaciones y técnicas tanto frente a ataques y agarres con manos vacías o con armas (jo o bastón, Boken o espada de madera y tanto o cuchillo de madera).

El aikido trabaja tanto con ataques en posición de pie, como de rodillas y trabaja la defensa frente a uno o varios atacantes de forma dinámica.

El aikido es un arte marcial de origen japonés que enseña cómo resolver todo tipo de conflictos, mediante la no violencia, y la búsqueda del entendimiento y la paz entre las personas, y parte del objetivo de convencer a un oponente del cese de su actitud beligerante.

Excluye la competición porque su finalidad no es la de entrenarse para ser el vencedor sobre otros, sino para luchar contra las propias debilidades y defectos, así como de la idea de superación constante y la evolución como practicante de aikido y como persona.

Las técnicas de aikido pueden dividirse en dos grandes grupos fundamentales:

  • Técnicas de proyección: mediante las cuales aprovechando el impulso del compañero logramos apartarlo de nosotros o quitárnoslo de encima.

  • Técnicas de control con los que a partir de luxaciones y presiones ejercidas sobre todo en muñeca, codo y hombro inmovilizamos al atacante, se neutraliza el ataque del oponente


Las técnicas de aikido tienen además una serie de elementos básicos, sin los cuales sería imposible realizarlas adecuadamente, estos elementos son:

- Ganar el centro de gravedad del oponente para poder desplazarlo.

- No oponer nunca nuestra fuerza contra la fuerza del atacante.

- Canalizar tanto nuestra energía (el Ki) como del atacante y redirigirla para evitar la confrontación.

- Trabajar en actitud de alerta constante y a la vez relajada y ausente de tensión.

El aikido como arte marcial, evoluciona a partir de otras artes como el Jiu-jitsu (arte con manos vacías) o el Ken-Jutsu (arte de la espada, que se practica con armas tradicionales). Sin embargo el aikido no tiene como objetivo golpear o derrotar al contrincante, sino en usar su propia energía para dominar y controlar su ataque, demostrándole que no tiene efectividad para que cese en su actitud hostil hacia nosotros

El aikido no es ni mucho menos un arte estático, todo lo contrario. Es fundamentalmente un arte dinámico y tremendamente plástico que pone énfasis en los movimientos, sobre todo circulares.

Desde esta perspectiva dinámica el aikido es un arte marcial que utiliza los principios básicos del movimiento y la biomecánica generando posiciones y movimientos en función del ataque del oponente, que nos permiten movimientos efectivos usando una gran variedad de desplazamientos y movimientos que nos procuran una situación de ventaja frente a los oponentes.

Dicho oponentes o atacante, que en aikido se conoce como uke, en contraposición al que se defiende que se conoce como tori; es percibido en aikido no como nuestro antagonista, sino como alguien con quien debemos formar una unidad (mediante la unión de su energía hostil a la nuestra a través de una adecuada posición y técnica), dicha unidad de fuerzas (Kimosubi) es lo que nos permite ejecutar de manera eficiente nuestra defensa y evitar sufrir daño u ocasionarlo a nuestro atacante.


Pero, pese a ser un arte marcial, el aikido es mucho más que un método de autodefensa, es una paz interior, un método de autoconocimiento de uno mismo, potenciación de nuestra salud física, y de desarrollo corporal y respiratorio, etc.

La práctica del aikido es una práctica constante en la que te encontraras ayudado y guiado por tus compañeros, de tal forma que no sólo recibirás enseñanza de tu maestro, sino que cada alumnos antiguos ge mayor grado (Sempai) tiene el compromiso y obligación de ayudar, practicar y guiar a los alumnos principiantes (Kohai)